lunes, 10 de junio de 2013

Los libreros hacen el capullo (de nuevo).

Se abre el telón. Aparece un librero pecholobo atándose el cordón de un zapato -sus músculos se tersan al son de sus movimientos-, clavando el cuchillo en su funda de tobillo -como diría Pérez Reverte: ¡cling!- y anudándose una cinta en la frente. Primer plano a la cara de chulo. ¿Cómo se llama la película?

Un capullo va a quebrar.

La gilipollez es tan grande como que un grupo de libreros denunciará a Amazon por aplicar un cheque regalo de cinco euros al descuento del diez por ciento existente. ¡Bellacos! ¡Benefician al cliente y no lo joden! No habrá paz para los malvados.

Supongo que en Amazon están temblando de miedo y tienen diarreas de pánico. Igual que en la Casa Blanca: parece que Barack Obama se ha cortado su polla negroide y se la ha enviado como tributo a los libreros españoles, los cuales, halagados por tan suculento manjar, lo han rodajeado y degustado cual rica morcilla frita.

“Si el asunto llega a juicio y ganamos, lo que esperamos es que el Ministerio de Cultura del ministro Wert imponga un fuerte multa a Amazon y pague”, han asegurado desde CEGAL.

Pero, vamos a ver, si lo ganáis, ¿para qué coño va a hacer nada Wert? ¿No pone las multas el juez o qué? A ver si ahora Wert, además de indultar, también va a condenar según le apetezca. Pero ¿qué coño os habéis creído que es esto?

Otrosí: Ya el año pasado, los libreros anunciaron una demanda por el mismo motivo, si bien no se llevó a cabo por razones presupuestarias por parte del gremio.

Atención: dos días y lo retiran.

Por si no tuvieran los españoles bastante con la estúpida ley de precio fijo, con la que se pretende proteger a estos empresarios leprosos, también tienen que aguantar gilipolleces como el que se denuncie un puto descuento. Todo esto mientras la gente compra sus libros por Internet al extranjero o se los baja directamente porque le toman el pelo con los precios.

Últimas noticias: todo parece indicar que el gran monolito cilíndrico, tomado por los libreros como el gran miembro viril de Obama, no es en realidad sino un cuajarón de proporciones gigánticas, no se sabe si negroide o blancoide. Se sospecha que se trata de una broma de buen gusto ideada por el Pentágono. Los libreros, sin embargo, siguen afirmando haber degustado la castración del origen de todos los males y ya están haciendo planes para instalarse en la oficinas de Amazon, que seguro que cierra mañana.


1 comentario:

  1. Tampoco olvidemos que los editores en español europeo tienen más riesgo por tener muuuchos menos lectores, tanto por población como por porcentaje de lectura.

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